Historia

La Fundación Yo Puedo con Cristo es una entidad que comienza a dar sus primeros pasos para noviembre del 2011. Viendo que en nuestro entorno cada día más y más personas son diagnosticadas con cáncer, nos dimos a la tarea de poner un granito de arena en nuestra población puertorriqueña y en aquellos lugares donde se necesite de nuestra ayuda.

 

Si observamos las estadísticas de la Asociación Americana del Cáncer podemos ver la incidencia progresiva del cáncer en la población puertorriqueña. Las estadísticas para el 2004-2009 fueron 13,000 personas diagnosticadas con dicha enfermedad. Si las agrupamos por grupos de edad el 38% fluctuaban entre los 50-64 años; un 30% entre los 65-79 años y un 32% menores de 50 años. Para el 2004-2008 la mortalidad fue de 13,815 varones y 10,669 féminas. Aunque no existen datos científicos actualizados al 2013, podemos observar como el cáncer cada día prolifera.

 

Al recibir un diagnóstico de cáncer los tratamientos y efectos secundarios pueden producir un impacto emocional tanto para el paciente como para su familia. Como consecuencia, las responsabilidades familiares y financieras, juntamente con las responsabilidades médicas pueden provocar un gran nivel de estrés, tanto para los pacientes como para la familia. Con frecuencia los pacientes no se sienten libres para compartir sus sentimientos de desesperación, ansiedad y/o ira. A la vez, los familiares pueden sentir la necesidad de proteger a sus seres queridos. Sabemos que toda crisis presenta la oportunidad para crecer espiritualmente y fortalecer los lazos familiares. Es por esto que surge la Fundación Yo Puedo con Cristo, para brindar guía, apoyo y suplir otras necesidades que pueda tener esta población (tales como transportación, equipo médico, etc.), siempre y cuando esté dentro de nuestras posibilidades.

 

El nombre “Fundación Yo Puedo con Cristo” surge de la premisa que solos no podemos hacer nada en ciertas situaciones. El diagnóstico de cáncer es una de esas situaciones, ya que al ser diagnosticado se necesita de la ayuda de la familia, de los amigos y de apoyo espiritual.